Si esta idea ronda tu cabeza, antes de nada valora qué es lo que te llama de este campo. La formación empresarial o in company no es el chollo por el que suele tomarse, así que si tu única motivación es trabajar poco y ganar mucho te recomiendo otras opciones (la Quiniela, por ejemplo).
Si por el contrario sabes, o al menos intuyes, que es un sector que requiere esfuerzo y dedicación, entiendo que además del económico te impulsa alguno de estos factores:
– Te gusta la educación de personas adultas, y te entusiasmas ante una audiencia.
– Eres bueno transmitiendo conocimientos e ideas, y como siempre que se nos da bien algo, estás deseando utilizarlo.
– Has recibido uno o varios cursos y la labor del formador ha sido tan buena que estás deseando ser como él 🙂
– Tienes un montón de know-how, conocimientos punteros, experiencia valiosa o ideas innovadoras que estás deseando transmitir.
Todos son buenos motivos, y cuantos más de ellos acumules mejores perspectivas tendrás. Una acción formativa, sea de lo que sea, requiere que te guste lo que haces, que conozcas en profundidad el tema y, por supuesto, que sepas moverte en una clase. Y la buena noticia es que, excepto por lo de ser un experto en el campo, el resto se entrena con cierta facilidad.
Independientemente de tu formación y experiencia, seguramente hay un área de conocimiento en la que te mueves con soltura; procura partir de ahí, e investiga cómo puede aplicarse a la formación empresarial. En algunos casos es más obvio (software específico, management, PRL, marketing y ventas…), pero en otros tendrás que buscar una nueva perspectiva. Un buen modo de hacerlo es partiendo de la oferta formativa que ya existe: en los catálogos de la multitud de consultoras que han surgido a la sombra de la formación subvencionada tienes decenas de cursos sobre temas de lo más variado, entre los que encontrarás alguno que se aproxime a tu campo.
Si además acudes a portales de empleo, verás que todos los días hay ofertas que reclaman profesionales para impartir materias de todo pelaje, así que toma nota y repasa cuáles se aproximan a tus capacidades.
Y hablando de portales de empleo, precisamente te recomiendo que empieces tu carrera como formador por cuenta ajena, contratado por una consultora. Esto tiene dos ventajas fundamentales:
– Serán probablemente cursos de corta duración, con contenidos sencillos y un manual genérico de apoyo, lo que para empezar facilita las cosas. La calidad del manual es otro cantar, prepárate para elaborar el material que necesites prácticamente desde cero.
– La mayoría de consultoras no son muy quisquillosas con la selección de nuevos formadores externos, porque suelen tirar de ellos cuando les han fallado los habituales a última hora, o para cursos tan trillados que es difícil dar con una persona que no sea capaz de enfrentarse a ello. Tristemente, este no es un criterio que diga mucho en favor de la calidad de la formación, pero te vendrá de perlas para meterte en el mundillo. Con el beneficio adicional de que, si reúnes los requisitos de los que hablábamos al principio, destacarás con facilidad por encima del nivel medio.
Así pues, rastrea la red en busca de la oferta que te lanzará al estrellato, envía tu CV a las consultoras que encuentres (que serán muchas) y utiliza tu red de contactos para meter la cabeza en el mundillo. Es relativamente sencillo acabar dando con una oportunidad.
¿Tienes lo que hay que tener?
Un requisito que sí tendrá en cuenta invariablemente quien vaya a contratarte es que tengas experiencia docente. No son raros los ataques de miedo escénico en el último minuto que obligan a cancelar un curso porque el formador no sabía dónde se metía y no era capaz de aguantar la presión. Si de verdad te llama esta profesión y nunca has dado una clase, no te preocupes porque foguearse es relativamente fácil (o al menos lo es descubrir si vales o no), prácticamente todo vale para romper el cascarón, y puedes empezar inmediatamente:
– Habla con tu jefe en el trabajo para plantearle que seas tú quien enseñe a los nuevos a usar el software de la empresa, impartiendo sesiones teórico-prácticas.
– Ofrécete a reforzar la prevención de riesgos con una presentación aprobada por el servicio de PRL (en las oficinas suele repartirse un manual, hacer un test y hasta luego, cuando una simple charla con el proyector lleva el mismo tiempo y convierte un trámite en un aprendizaje real).
– Busca hueco para dar clases particulares por cuenta propia o en una academia.
– Sé profesor voluntario en una ONG.
– …
Si además te haces un curso de formador ocupacional o de formador de formadores rizarás el rizo y te resultará mucho más fácil encarar la tarea, pero bajo ningún concepto vayas a dar un curso sin haber tenido unas cuantas experiencias previas de lo que es una acción formativa. Da el paso sólo cuando ya hayas comprobado que esto es lo tuyo, por tu bien y por el de la profesión: la formación de calidad es mucho más que impartir unos contenidos más o menos complejos, y un formador es mucho más que un experto en esos contenidos, como sabe cualquiera que haya pisado alguna vez una escuela.
Diseño didáctico 
Me ha encantado tu entrada!!! La idea de dedicarme a la formación lleva rondándome un tiempo la cabeza ya que he desarrollado tareas de formación en trabajos anteriores, eso si, a pequeña escala. Así que el minimo-minimisimo que comentas de experiencia creo que lo podria tener (La experiencia justa para no tener panico escénico).Cuando he leído los 4 factores que enumeras como motivaciones me he sorprendido al verme muy identificado los 4. Los 3 primeros de forma positiva, es decir pienso que los cumplo… y también me ha sorprendido que es justo el 4º factor el freno que tengo es decir, veo que el el factor que me falta, justo el mas complicado… pero bueno 3 de 4 no esta mal… (esto me anima).Y encima dejas ideas de como empezar a ganar experiencia, sugerencias de cursos… JUSTO LO QUE NECESITABA!!!Un saludo,
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Hola, SiLBaNDo;Gracias por tu comentario y por pasarte de nuevo por aquí. Me alegro de que la entrada haya servido para animarte. Ya que tienes motivación y vocación, estoy seguro de que o bien tienes ese \»punto 4\» del que hablaba, o bien estás en condiciones de conseguirlo. Simplemente determina cuál es tu campo, y sigue profundizando en él.Y si hay algún tema concreto que quieras que comente, yo encantado, claro. ¡Y mantennos informados de cómo va tu proyecto!
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Buenas tardes,Desde siempre me ha llamado la atención el tema de la docencia, pero nunca había pensado en que podría formar parte de mi vida, pero últimamente, sea por la rutina laboral o por otros aspectos, cada día veo más de cerca un cambio en mi vida, y cada día ocupa más momentos en mi mente la idea de ser formadora, pero…cómo sé si podría servir? Soy un poco tímida y no tengo experiencia en el tema, pero me encanta todo lo relacionado con el coaching, de hecho estoy asistiendo como alumna a un curso de Inteligencia Emocional y me encanta. Crees que una persona algo tímida hasta que coge confianza podría llegar a ser una buena formadora? y sobretodo, comenzando desde el principio, ya que mi profesión no tiene nada que ver con el tema. Muchas gracias por tu respuesta.
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Hola;Ateniéndome a lo que comentaba en la entrada, si tienes ciertas cualidades claro que puedes ser formadora. La timidez es un obstáculo, claro, pero uno que se resuelve de forma relativamente sencilla empezando con retos pequeños que puedas asumir. Mi principal consejo es que no te lances a dar un curso sin haber probado antes con algo más sencillo.Ya que estás haciendo un curso, fíjate (además de en el contenido) en las estrategias que usa el formador, en su forma de hablar, los recursos que utiliza, cuándo hace ejercicios y de qué tipo… Si es un curso participativo, aprovecha para vencer tu timidez participando todo lo posible y hablando ante todos siempre que puedas y participando e iniciando debates. Es una meta sencilla que debería darte pistas sobre tu capacidad para hablar en público.Gracias por tu comentario, espero que este blog siga siéndote útil y que cuentes qué tal va ese proyecto :)¡Saludos!
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Hola,Llevo toda la tarde sentada delante del ordenardor buscando cosas relacionadas con los formadores. Estoy haciendo un cambio en mi vida profesional y siempre he tenído muy claro que soy buena comunicando, que llego con facilidad a las personas y que tengo una habilidad natural en expresar lo que pienso y hacerlo llegar con claridad. Estoy haciendo un curso y mi formador me ha animado a que tire por este camino, ha apostado por mi en este campo, y siempre me había emocionado. He trabajado 20 años en la administración comercial, y he hecho muchos cursos dentro y fuera de ella, coaching y comunicación. Creo que ese sería mi campo, el tema rrhh y comunicación y gestión de empresa. No tengo titulación universitaria, pero me veo muy capaz de ser una buena formadora. Voy hacer un curso de formación para formadores y estoy mediando con la escuela en la que estoy recibiendo este curso para que me den una oportunidad. Mi profesor me apoya y voy a por ello. Que más podría hacer para estar en el buen camino. ¿Qué me aconsejas?. Muchas gracias.
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Hola, Viviendo Adrede;Por lo que cuentas, tienes lo que hay que tener: facilidad, ganas, conocimientos en tu campo, conocimiento de la profesión, y experiencia, sea o no muy amplia. Las únicas recomendaciones que se me ocurre son muy genéricas, pero no por ello menos válidas: planea tus cursos pensando siempre en tus clientes últimos (los alumnos), prepárate par alguna decepción o fracaso (¡y persevera!), y aplica algún método para analizar qué haces bien y en qué fallas (grábate, pasa cuestionarios propios breves y específicos, comprueba el impacto real de tus cursos…). Ah, y en el curso de Formación de formadores fíjate más en el formador que en el contenido. Se puede sacar mucho observando e imitando a un buen docente.Y, por supuesto, cuéntanos qué tal te va :)Si quieres hacer alguna consulta más específica aquí me tienes por si puedo aportar algo, claro ;).Saludos,DF
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